jueves, 2 de diciembre de 2010

0 Atlético de Madrid-Aris Salonika: el Atlético se suicida en Europa

Inexplicable, esta es la palabra que sale del aficionado colchonero. El Atlético ha dilapidado su defensa del título ante un Aris que jamás debió ser rival, pero los colchoneros se han empeñado en hacerse el hara-kiri, con errores defensivos por doquier, inseguridad, desastre táctico y cambios inoperantes.
El partido comenzaba con un bofetón inicial, en el primer minuto Koke se aprovechaba de un clamoroso fallo de David de Gea que no pudo atrapar un balón fácil generando un barullo, tiro al palo incluido, que el delantero malagueño definió desde el área grande. 0-1 y de nuevo el Atleti a remar contracorriente, por tercer partido consecutivo, la duda era saber como se comportaría ante la nueva adversidad.
Las dudas se comenzaron a despejar en el minuto 11, una preciosa combinación entre Agüero y Simao en el flanco izquierdo del ataque atlético se resolvió con un disparo del portugués que buscó el palo largo y encontró la madera. El rechace lo aprovechó Forlán que batió con facilidad al meta griego. Empate y tranquilidad colchonera, apenas 10 minutos había durado la ventaja del Aris.
Lanzados por el empate y con la certeza de que el Atleti era muchísimo mejor equipo, el segundo gol llegó rápidamente. Minuto 15 de partido, Domínguez asistió a un Agüero que solo ante Sifakis definió por bajo al meta griego. 2-1, partido encarrilado tras el traspiés inicial, el Aris empeñado en demostrar el por qué de su séptima posición en la liga helena y el por qué de haber perdido más partidos que de haberlos ganados.
A raíz de la ventaja rojiblanca, el Atleti se gustó a sabiendas de la diferencia existente entre los 2 equipos y comenzó a combinar, con Mario Suárez muy participativo, con Reyes y Simao desbordando una y otra vez a los laterales griegos, pero con el gol resistiéndose a pesar de las dudas ofrecidas por Sifakis, el flojo portero heleno.
Llegados al descanso con un 2-1 que se antojaba escaso, pero que no inquietaba debido a la previsible superioridad en el juego y en el marcador del Atleti en el segundo acto.
La reanudación no cambió la tónica del primer acto, el primer aviso serio fue una internada de un participativo, pero errático, Ujfalusi que conectó con Forlán, el disparo del uruguayo fue repelido nuevamente por la madera.
Todo seguía igual, apenas había novedades, el Aris a punto de entregar la cuchara, el Atleti confiado en el marcador, el público bostezando, los griegos dejando de saltar pero...Minuto 55, Domínguez comete un absurdo penalty a Lazaridis, absurdo de hacer, sibilino de señalar y fácil de ejecutar. Gol de Koke, empate a 2 y el Aris recobró el aliento, con un Atlético aturdido por la acción innecesaria de Domínguez y por la dificultad de afinar el objetivo a seguir, mientras el Bayer se deshacía del Rosemborg, el empate en la última jornada en Alemania sería bueno, pero ante un rival tan flojo como el Aris, replegar filas y dar por buenas las tablas sería inexcusable ante la afición que andaba mosca después del partido frente al Español. Así transcurrieron los siguientes minutos una especie de "ni contigo ni sin tí" versión futbolera, con Reyes intentándolo en nombre de todos sus compañeros, con Forlán marrando otra clara ocasión, con Simao siendo señalado una vez más por Quique al ser cambiado por Diego Costa y con Tiago dando razones de peso a los que pensaban que su nueva cesión era un error.
Con estos condicionantes, lo que se presumía un final del partido en la portería de Sifakis se tornó en drama para los colchoneros, una jugada tragicómica con infinidad de rechaces, apariciones milagrosas de De Gea y culminada con un error de bulto de Godín finalizó en gol de Lazaridis. 2-3 el Aris estallaba de júbilo, empujado por sus 3000 irreductibles, que veían como virtualmente estaban clasificados a costa de un esquizofrénico Atleti.
A partir del gol y hasta el final del partido el Atleti fue un descontrol, un enfermo terminal que sabía cual era su destino, con un dibujo táctico caótico, con Forlán empeñado en disparar desde Montevideo, con Fran Mérida demostrando que no es revulsivo de nada, con Raúl García intentando hacer lo que no sabe. El resultado de este descontrol era obvio, el Atleti no consiguió remontar ante un público atónito que no comprendía como se había escapado un partido tan sencillo.
Así concluyo el envite, donde el Atleti mereció más a pesar de sus errores y en los que ha dilapidado sus opciones europeas, salvo que al Rosemborg le de por envalentonarse en la caliente Salónica, todo esto contando con un triunfo rojiblanco en el Bay Arena de Leverkusen. Una defensa del título bastante triste, que puede concluir el día 16...o no, esto es fútbol.
A.Briega

0 comentarios:

Publicar un comentario

 

No queda sino batirse Copyright © 2011 - |- Template created by O Pregador - |- Powered by Blogger Templates